jueves, 24 de noviembre de 2011

Un encuentro inolvidable

Según mi querido maestro Tolle debemos dejar que la vida fluya a través de nosotros.
Palabras de una persona muy especial que hoy ha dado una pequeña charla: "Debemos dejar de pre-ocuparnos" del futuro, para "ocuparnos" del presente.
Es en el momento presente cuando surge la respuesta adecuada a las circunstancias que estemos viviendo.

Podríamos decir que para ponerlo en práctica hay que confiar plenamente en la vida, en la energía universal que nos conecta a todos y a todo. Sin embargo, es el propio momento presente quien te va dando pequeñas muestras de que es así, y que te ayuda a volcarte con más energía en el ahora, en cada momento.

Y volviendo al tema que este canal me depara hoy, me gustaría hablaros de una experiencia fantástica que he tenido esta misma tarde, en una conferencia sobre el Reiki.

Esta misma tarde, mirando el correo, he visto que en el lugar donde me apunté a un gimnasio hace un año (lugar por el que ya no suelo aparecer), ahí iban a dar una charla de introducción al Reiki. Pensé que sería alguien que intentaría venderme sesiones de dicha disciplina. Me equivoqué.

Llegué a la sala 45 minutos antes de comenzar. No quería ir con prisa, ni perder la oportunidad de estar ahí, dado que el aforo era limitado. Cuando comenzó la charla, cual fue mi sorpresa, Merche, la ponente, comenzó a hablar del fluir de la energía universal, y conectó su mensaje con el fluir de la vida en el presente. Nos habló de dejarnos llevar por nuestra intuición, de que todos formamos parte de una misma conciencia universal, y de cómo todos estamos conectados.

Nos habló de vivir el presente, y de que ése era el propósito más importante de nuestra vida, pues es en el presente donde vivimos toda nuestra vida, y donde nuestras acciones cobran sentido.

Y añadió algo muy especial que me encantó recordar: La respuesta llega siempre en el momento presente. Hay que confiar en la vida y no pensar tanto en lo que pasó o lo que pasará, porque si estamos presentes, de nosotros, de nuestro interior fluirá la acción adecuada, en el momento adecuado.

También nos transmitió ese "saber vivir", sin juzgar a los demás, ni preocuparnos de sus problemas, sino simplemente estar atentos y ocupados de nuestro presente, que es con lo único que podemos y debemos afrontar.

Y con todo ello, además de haberme enseñado los principios del Reiki, he disfrutado enormemente ampliando mi conciencia sobre la vida y lo que nos rodea, y mejor aún, lo he compartido con otras personas, y con una fuente de energía y de conciencia en el mundo. Ha sido maravilloso.

Al terminar la charla, mientras todos marchaban y la felicitaban, esperé viviendo intensamente aquel momento, su haz de presencia que tanta energía transmitía. Y finalmente, cuando se acercó a mí para ver si tenía alguna pregunta, únicamente le di un sencillo, pero inolvidable abrazo. Un abrazo a la vida, al universo, a alguien que estaba plenamente consciente para sentir lo que todo ello significaba.

Ha sido uno de los mejores momentos de mi vida.

Después, tuvimos una breve conversación, hablando más con nuestros silencios que con nuestras palabras.

Y con todo nuestro amor nos despedimos, sabiendo que sea cuando sea cuando nos volvamos a ver, algo ha quedado compartido dentro de nosotros.

Gracias a la vida por haberme enviado este correo, hoy, y haberme invitado a ir.
Gracias a Merche, por haber querido ofrecer lo que es su ser, y por haber sido fuente de conciencia.
Gracias a mi librero del barrio, que un día charlando me aconsejó leer el libro que tanto comento en este blog. Sin él, mi vida ahora sería algo probablemente diferente.
Gracias a todas las dificultades que he pasado este tiempo para haberme empujado hacia el camino de la plenitud humana.
Y gracias a ti por leer estas lineas.

Te envío un cálido abrazo cargado de energía.

1 comentario: