Y siguiendo con el tema del Reiki, he de decir que en estos momentos estoy esperando una llamada de una persona muy significativa referente a este tema... que viene a ser la joven que me dio una charla de presentación sobre el Reiki.
Hablé de esta persona en mi entrada anterior (Leer - Un encuentro inolvidable).
Lo importante no es el hecho de estar esperando una llamada suya. Lo importante es el hecho de que no puedo estar seguro si la recibiré pronto, o durante el día de hoy, o cuándo. De hecho, quizás pudiera no llegar a llamarme por algún motivo.
Y es importante darse cuenta de que lo verdaderamente importante sigue siendo vivir cada momento, sin dejarme llevar por la emoción interna de aparente alegría por hablar con ella, que en el fondo se acercaría más a una ansiedad por recibir la llamada. O dicho de otra forma: estar haciendo algo que queda en el futuro, en un lugar distinto donde estoy ahora.
Cuando esperéis un acontecimiento importante, no os dejéis llevar por la emoción de lo que váis a vivir. Utilizad esa alegría para volver al presente con buen ánimo, sin pensar en lo que pasará.
Si os alegráis de algo que pasará en un futuro, tened presente que lo verdaderamente importante es lo que estáis viviendo en ese momento: la alegría de la oportunidad de poder vivir ese acontecimiento (y no que se vaya a producir el acontecimiento como tal). De esta forma, si por algún motivo no saliera adelante, siempre estaréis felices por todos esos ánimos que habéis disfrutado, en vez de lamentar lo que ya estabais esperando.
No os dejéis llevar por las ilusiones, por buenas, cercanas y certeras que parezcan, porque lo que estáis sintiendo, y lo que estáis disfrutando, lo estáis viviendo en el presente, y no hace falta que llegue (incluso que suceda) el acontecimiento para "disfrutarlo"!
Un abrazo a todos
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