jueves, 24 de noviembre de 2011

Un encuentro inolvidable

Según mi querido maestro Tolle debemos dejar que la vida fluya a través de nosotros.
Palabras de una persona muy especial que hoy ha dado una pequeña charla: "Debemos dejar de pre-ocuparnos" del futuro, para "ocuparnos" del presente.
Es en el momento presente cuando surge la respuesta adecuada a las circunstancias que estemos viviendo.

Podríamos decir que para ponerlo en práctica hay que confiar plenamente en la vida, en la energía universal que nos conecta a todos y a todo. Sin embargo, es el propio momento presente quien te va dando pequeñas muestras de que es así, y que te ayuda a volcarte con más energía en el ahora, en cada momento.

Y volviendo al tema que este canal me depara hoy, me gustaría hablaros de una experiencia fantástica que he tenido esta misma tarde, en una conferencia sobre el Reiki.

Esta misma tarde, mirando el correo, he visto que en el lugar donde me apunté a un gimnasio hace un año (lugar por el que ya no suelo aparecer), ahí iban a dar una charla de introducción al Reiki. Pensé que sería alguien que intentaría venderme sesiones de dicha disciplina. Me equivoqué.

Llegué a la sala 45 minutos antes de comenzar. No quería ir con prisa, ni perder la oportunidad de estar ahí, dado que el aforo era limitado. Cuando comenzó la charla, cual fue mi sorpresa, Merche, la ponente, comenzó a hablar del fluir de la energía universal, y conectó su mensaje con el fluir de la vida en el presente. Nos habló de dejarnos llevar por nuestra intuición, de que todos formamos parte de una misma conciencia universal, y de cómo todos estamos conectados.

Nos habló de vivir el presente, y de que ése era el propósito más importante de nuestra vida, pues es en el presente donde vivimos toda nuestra vida, y donde nuestras acciones cobran sentido.

Y añadió algo muy especial que me encantó recordar: La respuesta llega siempre en el momento presente. Hay que confiar en la vida y no pensar tanto en lo que pasó o lo que pasará, porque si estamos presentes, de nosotros, de nuestro interior fluirá la acción adecuada, en el momento adecuado.

También nos transmitió ese "saber vivir", sin juzgar a los demás, ni preocuparnos de sus problemas, sino simplemente estar atentos y ocupados de nuestro presente, que es con lo único que podemos y debemos afrontar.

Y con todo ello, además de haberme enseñado los principios del Reiki, he disfrutado enormemente ampliando mi conciencia sobre la vida y lo que nos rodea, y mejor aún, lo he compartido con otras personas, y con una fuente de energía y de conciencia en el mundo. Ha sido maravilloso.

Al terminar la charla, mientras todos marchaban y la felicitaban, esperé viviendo intensamente aquel momento, su haz de presencia que tanta energía transmitía. Y finalmente, cuando se acercó a mí para ver si tenía alguna pregunta, únicamente le di un sencillo, pero inolvidable abrazo. Un abrazo a la vida, al universo, a alguien que estaba plenamente consciente para sentir lo que todo ello significaba.

Ha sido uno de los mejores momentos de mi vida.

Después, tuvimos una breve conversación, hablando más con nuestros silencios que con nuestras palabras.

Y con todo nuestro amor nos despedimos, sabiendo que sea cuando sea cuando nos volvamos a ver, algo ha quedado compartido dentro de nosotros.

Gracias a la vida por haberme enviado este correo, hoy, y haberme invitado a ir.
Gracias a Merche, por haber querido ofrecer lo que es su ser, y por haber sido fuente de conciencia.
Gracias a mi librero del barrio, que un día charlando me aconsejó leer el libro que tanto comento en este blog. Sin él, mi vida ahora sería algo probablemente diferente.
Gracias a todas las dificultades que he pasado este tiempo para haberme empujado hacia el camino de la plenitud humana.
Y gracias a ti por leer estas lineas.

Te envío un cálido abrazo cargado de energía.

martes, 22 de noviembre de 2011

La búsqueda de un camino que enriquece

Pese a las dificultades del día, y de encontrarte en circunstancias complejas que te tienen desorientado, es imprescindible mantener un ejercicio constante por acercarse a la conciencia del presente.

Es en los momentos más dudosos cuando debes "recordar", o mejor dicho: sentir, lo que tu interior te sigue diciendo. Algo tan simple como: ¿qué hace que me SIENTA feliz? ¿Qué me llenaría en un futuro? A la hora de aplicarlo: futuro = ahora!

Y lo mejor que puedes hacer es acercarte a esas ilusiones, siempre con los ojos bien abiertos, anclado en el presente, donde puedes Vivir cada segundo de tu vida plenamente.

Busca la quietud y el silencio que hay en tu interior. Confía en él, o confía en las sensaciones-mensajes que te intenta transmitir.

No vale la pena mantenerse en una lucha mental interna, cuando la vida se abre camino ante ti a cada segundo. Trata de dejar las emociones a un lado, que sólo nos mantienen en la cuerda floja, y especialmente intentar mantener a distancia las más negativas, que provocan reacciones involuntarias de las que nos solemos arrepentir.

Mantente presente, busca la conexión con tu cuerpo interno constantemente, y todo acabará yendo como tú desees que vaya. No por fuera, sino por dentro, que en esencia, es lo que a fin de cuentas importa.

Te deseo amor y una vida plena.

domingo, 20 de noviembre de 2011

Vivir plenamente cada momento

Vivir plenamente cada momento es el propósito más importante de nuestra existencia... algo así como el sentido primario de nuestra vida. Nuestra realización personal interna: ser nosotros mismos en todo momento. Y sólo podemos vivir cada momento en el presente. Un momento nunca pasa dos veces por delante de nuestra vida.

Vivir la vida supone vivir el presente. Y vivir el presente requiere Aceptar la vida tal y como es. No tienes que aceptar ningún tipo de juicio ni pensamiento procedente de tu mente, sino aceptar tu verdadero presente: lo que te rodea en tu vida en este momento, como: qué energías fluyen por tu cuerpo, que síntomas tienes, qué es lo que te rodea (qué ves, que oyes, que hueles...)

Aceptar una situación mental (esta persona es de esta forma, él me dijo esto, el otro mi hizo aquello...) es un proceso sin sentido, pues estás aceptando algo que no existe, que no es real en la vida presente... sólo es una mera proyección o visión de tu mente.

Vivir un momento significa sentirlo, y no pensarlo, ni reflexionarlo, ni analizarlo, ni juzgarlo, ni valorarlo.
Y cómo vivir el momento? Sintiendo y escuchando a nuestro espacio interior silencioso. Sintiendo nuestra conexión con nosotros mismos, en nuestro interior. Sentir nuestra unión con el mundo. Sentir que todos estamos unidos de alguna forma, que todos formamos parte de una misma conciencia, que se manifiesta de diferentes formas en cada persona, animal o cosa del mundo. Todos estamos unidos, y el amor genuino es expresión de esta unidad.


Para vivir un momento todo comienza por dejar de lado todos nuestros pensamientos que nos dicen lo que tenemos que hacer, lo que no, lo que está bien, lo que está mal... No es que no tengamos que encontrar respuestas a todo ello, sino que las respuestas únicamente se responderán en el momento exacto en que requieran respuesta. Tranquilo, no por pensar más, llegarás a una mejor respuesta. Probablemente suceda al revés, pues la respuesta es el resultado de un desgaste energético interno.

La respuesta aparecerá en algún momento presente. No sabes en qué presente será, pero sí que sabes que la forma de conseguir la mejor respuesta es estando muy atento a cada momento, viviéndolo plenamente.

De hecho, la respuesta no surgirá realmente de tu mente, sino de una inteligencia mucho más profunda que fluye desde dentro de ti hacia fuera. Y esa inteligencia, esa sabiduría, aparecerá cuando sepamos estar conectados con nuestro ser interior, sin que se encuentre tapado por los juicios mentales. No es una teoría que debas creer, sino algo que tú mismo puedes experimentar.

La vida te dará la respuesta cuando la necesites, y tú sólo tienes que estar preparado para recibirla.

Todo lo que necesitas está en tu interior, no necesitas estudiar nada para vivir plenamente, al igual que cualquier persona, por muy humilde o analfabeta que pueda parecer, tiene toda la capacidad para ser una persona sabia y vivir una vida plena y auténtica.

En próximas entradas quizás vaya creando ejemplos de cómo vivir y afrontar el presente, y como dejar de lado a los engañosos procesos mentales.

A quien lea estas líneas, os deseo buen día, o buenas noches

sábado, 19 de noviembre de 2011

La melodía del ahora

Hay 2 formas de vivir la música: analizarla, o sentirla.
Sentirla supone sentir la esencia de la misma. Y cualquier música es vibrante por naturaleza, independientemente de su estilo, o de lo que desee transmitir.

La música puede ser el resultado de una "composición" estudiada, o puede ser la transmisora de lo que alguien siente en su interior, de sus emociones.

Si transmite emociones, éstas son transformadas en las vibraciones que dicha música conlleva. Eh ahí las vibraciones con las que puedes conectar, o sentirte conectado.

Si alguna vez te has dejado llevar completamente por una obra determinada, ahí podrás destapar tu estado interior en ese momento. Es la propia música la que te invita a conectar con lo que fluye dentro de ti. Y es asímismo una gran guía para saber si la música es un reflejo de tu estado de conciencia, de tus emociones, o de tus aflicciones internas.

Escúchate a ti mismo cuando sientas la música, y te habrás descubierto en la riqueza del presente.

Escucharse a sí mismo es sentir tu la energía que fluye por tu cuerpo en ese momento. Sentir todo lo que llega a tus sentidos. Es darse cuenta de cómo nos encontramos en ese momento: ¿cómo es mi respiración? ¿en qué estado me encuentro por dentro? ¿cómo me siento?

Y para escucharse de esta manera, es básico y primordial dejar de lado a todo nuestro proceso mental: silenciar nuestra mente, nuestros pensamientos. Incluso los  que hagan referencia a las preguntas que nos realizamos.

¿Cómo me siento? "Me siento bien". Esta respuesta, es una etiqueta de nuestra mente, y si nos aferramos a ella, no sentiremos la verdadera Sensación de cómo nos sentimos. Por tanto, no encontremos las respuestas en los pensamientos, sino en la conexión con nuestro cuerpo.

El silencio interior (mental) es el mejor portador de la respuesta.

Un abrazo

jueves, 17 de noviembre de 2011

El curriculum de mi padre

Es una oportunidad única el poder preparar el curriculum de tu padre. Diseñar una buena exposición no sólo de su experiencia profesional, sino de sus cualidades personales, y de todo lo que puede ofrecer.

Transmitir la esencia de una persona en un curriculum, que es un lugar donde debes etiquetar ciertos aspectos de una persona, ha sido un reto de lo más satisfactorio para mí.

Hemos tenido la oportunidad de fortalecer la conexión que hay en nuestra familia. Gracias... a quien me haya dado la oportunidad de vivir este momento.

Un abrazo a quien lea estas líneas

martes, 15 de noviembre de 2011

Algunas reflexiones

Aquí os dejo reflexiones que van llegando a mi vida. No pretendo recopilar un gran abanico de reflexiones, sino sólo las que vayan llegando a mi vida y sienta que pueden aportar algo.

Debemos tener presente las palabras nunca son correctas ni incorrectas del todo, pues son etiquetas a algo que está más allá. La forma de entender las frases es sentir hacia dónde apuntan éstas.

Si deseáis que valore alguna frase, podéis añadir un comentario, y estaré encantado de hablar sobre ellas.

Un abrazo y espero que las disfrutéis:

El amor
Declaración de amor: Eres una persona sencillamente maravillosa. Siento un amor hacia ti que apenas puedo expresar, y sólo con ser consciente de ello se me llenan los ojos de lágrimas. Cualquier adjetivo que intento añadir acorta la inmensidad de lo que deseo ofrecerte o compartir contigo. No deseo que lo comprendas, ni que lo etiquetes, ni que lo respondas. Sólo que lo sientas.

Sobre el tiempo

SMS de amor - "Ya falta poco para vernos!"
Respuesta al sms - "Y aún puedes vivir 1h plenamente antes de que nos veamos ;)"


Sobre el sentido de la vida

¿El fin justifica los medios, o son los medios los que justifican el fin?
Ni uno ni otro. Si la vida es presente, y sólo puedes vivir el presente, dar importancia al fin es dar importancia a algo que no existe, más que como una proyección mental en tu mente.
Quien desee vivir plenamente, tendrá como consideración que cada medio es un fin en sí mismo, y ese fin a su vez es un medio para su mayor propósito en la vida... el único que exite en la vida REAL... vivir plenamente el presente.


Sobre la realización personal:

Reflexión de una persona muy trabajadora: Así no hay quien viva. No me siento bien sin hacer nada. A ver si encuentro trabajo de una vez ya.
Respuesta: Dado que no puedes elegir estar trabajando en este momento, no vale la pena que te lleves un mal rato. Mientras no encuentres trabajo, puedes llevarte mal rato, pero no servirá para nada. Sólo puedes vivir plenamente cada momento. Aprovechar cada momento presente de la mejor forma que puedas. Hoy es sábado, fin de semana: Disfrútalo plenamente. El lunes puedes coger los curriculum y vivir plenamente tu búsqueda de empleo.

Reflexión de una persona sin ganas de trabajar: No tengo ganas de trabajar ni ilusión por nada. No sé qué puedo hacer.
Respuesta: Vive plenamente tu desilusión, pero no la alimentes con pensamientos en tu cabeza. Escúchalos como un observador externo, sin identificarte con ellos. Tú no eres tus pensamientos. Si aceptas lo que sientes por dentro plenamente, en el sentido de dejarlo estar ahí, sin apoyarlo mentalmente, podrás en algún momento dejarlo atrás, y empezar a vivir nuevamente.
Es probable que te sientas así por cómo te valoras, pero tú no eres lo que piensas. Lo que piensas son etiquetas de tu mente. Tú eres más bien el silencio que queda en tu interior cuando dejas de pensar, y esto tampoco es cierto porque siguen siendo palabras... interpretaciones de mi mente.
Deja de hacer caso a lo que los demás o tu mente piensen de ti. Deja todo de lado, y decide firmemente sentirte bien contigo mismo. Cuando te sientas bien por dentro, es cuando brotarán energías que te ayuden a cambiar tu vida. La vida sólo quiere que vivas cada momento plenamente, no que des vueltas a tu pasado y futuro constantemente, porque son irreales.
Yo creo en ti, plenamente, te lo aseguro. ¿Crees tú en todas las personas? Quizás juzgar a otros te esté llevando a juzgarte de la misma forma a ti por dentro. Ama la esencia de los demás para poder amar la tuya propia, por encima de las debilidades, que no son más que defensas temporales que pueden dejarse a un lado.


Meditación efectiva para apaciguar la mente

La meditación esencialmente busca la quietud de la mente, y la sensación-realización de la persona permaneciendo en ese estado.

No soy un especialista en meditación, ni en yoga. Pero por mi experiencia, intentaré echaros una mano par frenar un poco las mentes más alocadas.

Supongamos que una persona está superando un momento difícil, lleno de circunstancias angustiosas que aceleran la producción de pensamientos negativos y descontrolados.

Es muy posible que en este momento acudamos a la meditación para intentar apaciguar el desaguisado mental. Sin embargo, al intentar dejar la mente sin pensamientos, en ocasiones resulta prácticamente imposible. Podemos sentir de hecho una gran tensión en nuestra cabeza. Podemos concentrarnos en esa misma tensión, intentándola no juzgar, ni pensar en ella, ni etiquetarla, con el propósito de ir transmutándola en paz y conciencia. Sin embargo, quizás esté la mente tan alterada que no podamos encontrar la forma de frenarla.

Cuando el visualizar un objeto o un color no funcione, y estar atentos a las sensaciones de nuestro cuerpo tampoco, entonces los mantras pueden ser una eficaz forma de frenar dichos pensamientos.

Un mantra puede consistir en pensar unas palabras para limitar nuestro pensamiento. Al visualizar palabras, estamos "ocupando" un poco a nuestro parloteo mental, centrándolo donde nosotros queremos.

Así, podemos usar palabras como "Dios es", o "Yo soy", y repetirlas cada cierto intervalo de tiempo, de una forma que nos resulte cómoda. No es necesario repetirlo mientras mantengamos espacio y silencio interior. Podría oscilar entre 20-30 seg y 1 minuto.

O como Tolle nos recomienda, hay una pregunta muy interesante: ¿Quién soy yo? Que provoca un silencio interior muy fecundo. Nos advierte también Tolle estar atentos si la mente nos lanza alguna respuesta, y desecharla, sea cual fuere la misma, pues estaría etiquetándonos y formando nuestro ego.

Hay un mantra que a mí especialmente me gusta mucho, y es la frase ¿Qué siento yo?. Me gusta porque además del silencio que provoca esa pregunta, automáticamente nuestros pensamientos "deciden" detenerse para poder contestar, por lo que resulta más fácil conectar con nuestro cuerpo interno, que es sentirnos por dentro, nuestro flujo de energía.

Para las mentes más inquietas, Tolle recomienda una antigua práctica muy útil, consistente en contar del 1 al 10 inspirando, y decrementar del 10 al 1 espirando. De esta forma, mantenemos a la mente más ocupada, y gradualmente, tras unas semanas, o quizás 1 ó 2 meses, podemos ir disminuyendo el número de la cuenta: del 1 al 6, del 1 al 3...

Y si tras pasar algún bache emocional no conseguís parar "el carro" de vuestro cerebro, entonces no os juzguéis. Trataos con amor y paciencia, y muy pronto cederá esa barrera... probablemente antes de lo que pensáis.

Recordad siempre que utilizar un objeto interior para meditar persigue el objetivo de alcanzar esa quietud interna tan deseada. No obstante, para alcanzarla se debería eliminar el objeto utiliado una vez nos mantenemos en ese estado de tranquilidad o quietud que buscamos. Detrás de ese objeto utilizado, dejándolo a un lado podemos encontrar nuestro espacio interior, fecundo, balámico y renovador.

Finalmente, tened en cuenta también que la meditación no debe consistir en ser un camino para llegar a algo (incluso a meditar más profundamente), pues si nos dirigimos hacia algo, sea lo que sea, perderemos conexión con nuestro espacio interior, nuestro presente. El grado de conciecia que consigas dependerá de ti, pero no es cuestión de recorrer ningún camino, pues en cada momento te encuentras ya en la propia meta.

Os deseo paz interior a todos,

Óscar

domingo, 13 de noviembre de 2011

Mi bisabuela, un ejemplo de sabiduría

Hoy he disfrutado enormemente durante la comida hablando sobre mi bisabuela Manuela, que murió hace ya unos años.

El tema me ha llegado a la cabeza tras una reflexión en estado de conciencia de hace algunos días. Simplemente, pensando en las aventuras y desventuras que llegan a casa de la familia, me di cuenta de un hecho que hasta hoy me había pasado totalmente por alto: la persona más sabia de mi familia probablemente haya sido mi bisabuela Manuela!

Por presentárosla un poco, fue una sencilla mujer que vivía en una casa que estaba en muy malas condiciones. Hoy en día se considera totalmente una casa en ruinas. Las paredes estaban completamente estropeadas, llenas de humedades. No estoy seguro, pero apostaría que en varias zonas de la casa había goteras. El clima al entrar en aquel lugar era similar al de estar en una casa abandonada. El suelo, viejo y parcialmente desnivelado, no ayudaba mucho a la dificultad que tenía mi abuela para andar.

Manuela vivía con una hija que tiene deficiencia mental, que le ayudaba parcialmente con algunas labores de la casa. Y otras labores, las tenía que realizar mi abuela, que iba asiduamente a su casa, porque mi bisabuela bien pronto perdió su facultad de andar.

Dicho de otra forma. La vida de mi bisabuela consistía básicamente en levantarse de la cama, y tras "prepararse", ir a sentarse al sofá de la gloria, que era un cuarto de quizás 6 metros cuadrados, con una mesa redonda en medio, y un calentador que colocaba debajo de la mesa.

Y ahí estaba todo el día, porque no podía andar, sin mayor novedad que las visitas que recibía de la familia de vez en cuando, y de la compañía de algún gato que solía tener de vez en cuando.

Y hace unos pocos días, me di cuenta de que mi bisabuela no era una "pobre mujer ciega y coja", sino todo lo contrario... vivió durante sus últimas décadas completamente feliz y dichosa.

Aunque no podía ni andar, ni ver, y duramente oír, ella siempre tenía una sonrisa para dedicar a todo el mundo. Una sonrisa directa de su humilde corazón. Siempre que la visitabas sentías aquella sensación de alegría y bienestar que le acompañaba. Siempre agradecía cada pequeño detalle de las personas, y cada pequeño detalle de la propia vida. El mero hecho de ver pasar una sobra delante de sí ya le proporcionaba felicidad y un motivo para disfrutar de ese momento.

Su corazón estaba lleno de bondad y serenidad, y jamás escuché yo, ni mis padres, una queja de ella. Ni relacionada con sus incapacidades, con su salud, su entorno, o su propia vida. Jamás tuvo reproches que dar, porque siempre prefería vivir una sonrisa de todo corazón. Que por cierto, curiosamente, para estar viviendo en un lugar en tan trágicas condiciones ambientales, sorprendentemente jamás enfermó, jamás tuvo catarros, ni virus, ni nada. Vivió sana y completa, con una espléndida lucidez (incluso cuando ya le costaba pensar), hasta el día que se fue.

Y ahora que me doy cuenta de ello, unos cuantos años después de su partida, me alegro de ser consciente de ello. Ella dejó esa semilla en nuestros corazones que hoy ha brotado en una sencilla conversación. Casi se me han salido las lágrimas al hablar de ella.

¡Qué grande era mi bisabuela!

Así que hoy apunto a una persona más referente en mi vida... una persona que me enseñó que se puede vivir sin nada, y tenerlo todo por dentro. Gracias abuela por lo que me has enseñado. Gracias por transmitirme aquella conciencia a través de una sonrisa, sin necesidad de videos, fotos, ni incluso conversaciones. Yo era pequeño cuando te fuiste, pero aquella forma de vivir fue más viva que todos los medios que utilizamos hoy para mantener vivos los recuerdos.

Si vosotros tenéis la suerte de vivir con personas capaces de vivir en ese estado constante de alegría y agradecimiento, aprovechad cada momento que compartís con ellas, porque ellas están ahí para recordarnos que la vida es plena, y es maravillosa, por difíciles que puedan ser nuestras circunstancias.

Gracias, abuela,
una y mil veces gracias!

Óscar

Te deseo muy buenas noches


Te doy las buenas noches,

pero antes de dormir, es importante que vayas con tu interior limpio y sosegado. El descanso es fundamental para renovar una vez más tus energías.

En primer lugar, da gracias por este momento de consciencia de tu interior. Da gracias por la oportunidad de dar gracias una vez más.

Y agradece interiormente todo lo que has vivido hoy. Agradece cada acontecimiento sucedido, y si ha sido difícil, agradece la oportunidad de poder aprender de él.

Perdónate todo lo que no hayas sabaido hacer bien. Haz una reflexión sobre en qué momento fallaste, y te sumiste en la inconsciencia (perjudicándote a ti miso o a otra persona, no hay diferencia). Desde una pelea, verbal o no, malas formas de hablar, malas decisiones... en conclusión, cualquier momento en el que tú no estabas Presente, y no sentías con amor. Analiza cómo conseguirás no entrar en la inconsciencia la próxima vez que te llegue una situación similar.

La depuradora de tus acciones y palabras es el amor, recuérdalo siempre. Utiliza el amor como un filtro por el que debe pasar toda tu vida, y así purificarás cada momento presente. Así vivirás una vida más sencilla, más limpia, más plena.

Perdónate todo lo que haya pasado, hoy o cualquier otro momento anterior. Si deseas vivir una vida de amor, debes amarte a ti mismo como al prójimo, y viceversa.

Acéptate tal y como eres. No eres el que fuiste en el pasado, ni el que serás en el futuro. No eres perfecto, y tampoco el que te gustaría ser plenamente. Eres lo que eres, y no aceptarlo es locura. Ámate por ser como eres, y agradece todo lo que eres, y lo que tienes.

Perdónalo todo, y a todos, como quieres ser tú perdonado. Ríndete al mundo, aceptando lo que es en este momento. Sé feliz por sentirte parte de la vida. Sé feliz porque pese a toda tu situación de vida, en este preciso momento puedes darte la grandeza de sentir amor, de amarte a ti y a los demás. No desees ser mejor persona... es mejor sentirse ser esa mejor persona.

Háblate con amor, paz y sosiego. Imagínate abrazándote a ti mismo como si fueras tu mejor apoyo personal, dedicándote esa confianza que merece cualquier persona dispuesta a vivir con el filtro del amor.

Ahora, decide con firmeza apagar tus pensamientos hasta mañana. Lo reflexionado, hecho está. Mañana más. Cada cosa en su momento. Si algo te atosiga en tu interior, decide conscientemente dedicar unos minutos de reflexión con todo el sentimiento interno de amor que te sea posible. Puedes mantenerte en contacto con tu cuerpo para ello, y cuando se aceleren tus pensamientos, deja de pensar hasta que la paz vuelva en ti. Si no hay paz interior, el pensamiento no será útil ni correcto, por muy grande que sea tu capacidad de razonar.

Y finalmente, una vez más, siente tu cuerpo, tan plenamente como te sea posible. Siente tus extremidades relajadas, la energía fluyendo por tus brazos y manos... el aire entrando en tus pulmones, el oxígeno alimentando tu cuerpo... y la energía de todo tu interior.





Siente el fluir de la vida dentro de ti. Siente el silencio. Agradécelo tanto como puedas, no de palabra, sino de sentimiento. Siente tu cuerpo, siente el espacio a tu alrededor, siente la vida... SIENTE!

Si eres capaz de cerrar los ojos con amor, la noche será placentera y el sueño balsámico.

Y mañana, será un día mucho más fructífero.


 

Recuerda... cada instante está esperando que te mantengas presente. Consciente de tu foma de vivir. Mantente conectado a ti mismo, a tu interior, al silencio que deja la mente quieta, a la energía que fluye por tu cuerpo.





No hay mejor manera de vivir, y de dar sentido a tu vida.

Buenas noches, paz y amor,

Óscar

jueves, 10 de noviembre de 2011

Introducción - ¿Qué es el poder del ahora?

Para los lectores que no hayan oído hablar mucho sobre este tema, intentaré dar una explicación básica. Espero conseguir que se entienda.

El poder del ahora es la enorme capacidad y energía que tienes en tu vida a tu disposición en un único momento de tu vida: Ahora!

La vida no es pasado, ni futuro, sino un constante presente. Y por tanto, es en este presente cuando sientes, cuando te expresas, cuando puedes actuar, o decidir no hacerlo. Todo sucede en el presente. TODO. Nunca podrás volver al pasado, ni podras actuar en el futuro. Sólo podrás hacerlo en el presente, aquí, y ahora. Por tanto, tu futuro y tu pasado son un mero reflejo del presente, y tienen mucha menos importancia que la que les solemos conceder.

A partir de esta sencilla premisa, el camino hacia el descubrimiento de nuestra capacidad plena es apasionante, y el resultado u objetivo es alcanzar un estado de sensación-realización conectando con nuestra propia presencia, en cada momento. En este estado, nos sentimos unidos a nosotros mismos y a la vida. Nos sentimos en paz. Es un estado de quietud interna, no de reflexión ni análisis mental, sino todo lo contrario.

Algo tan aparentemente trivial es lo que muchos conocen como "iluminación", y es la experimentación suprema de la vida, en la que la paz, la alegría y el amor rebosan por todo nuestro ser.
Quienes llegan a sentir este estado en algún momento de su vida lo que más anhelarán será volver a sentirlo, y por supuesto, poder mantenerlo en todo momento.

La clave está primeramente en comprender que no sois vuestra mente, sino mucho más, y que hay una inteligencia mayor que vuestros propios pensamientos. Podéis ser observadores del flujo de la mente, y vuestras emociones, que son el resultado de los pensamientos sobre el cuerpo. Observad los pensamientos, pero no los juzgueis, ni los consideréis vuestros. Muchas veces son un producto reflejo del miedo ante una situación que ni siquiera es real.

Concentraos en sentir vuestro propio cuerpo por dentro. Estáis sintiendo paz, alegría y quietud? O sentís un cierto malestar?

Es importante que os déis cuenta de que la felicidad reside en disfrutar el momento presente. Es decir: dejar de lado vuestra situación de vida, vuestros problemas del día a día, y centraros en este preciso instante: ¿tenéis algún problema justo en este momento? Si aprendéis a simplificar así vuestra vida, todo será mucho más sencillo. Y pronto descubriréis que el mayor propósito de la vida es vivirla plenamente, en cada momento, en el eterno presente.

Imaginaos ahora que podéis estar en plena felicidad, alegría y amor durante toda vuestra vida... ¿no vale la pena intentar encontrarla?

¿Y cuál es el siguiente paso? Puedes leer el resumen del libro "El poder del ahora" que he enlazado en la parte superior del blog. Ese texto te invitará a buscar el libro completo. Espero que puedas encontrar lo que estás buscando.

En realidad, no hay muchos conceptos que comprender para llegar a ser plenamente feliz. La felicidad no está más cerca de los grandes intelectuales, sino de todo aquel que sea capaz de SENTIR PLENAMENTE la vida en todos sus aspectos: su cuerpo, sus acciones, la belleza de lo que ve, la perfección de lo que le rodea... 

Todos los medios para ser feliz están en vuestro interior, y es ahí donde podréis encontrar todas las respuestas cuando aprendáis a buscar.

Es un viaje apasionante!

Un abrazo y mis mejores deseos,

Óscar

martes, 8 de noviembre de 2011

Cómo reforzar tu propia presencia I

El título de esta entrada es equivalente a decir "cómo reforzar tu propia conciencia", o "cómo conseguir permanecer más tiempo conectado, más fuertemente unido, al estado de sensación-realización interna", que es el estado de plenitud en el que todos deseamos vivir (y mantenernos sumergidos en él), seamos conscientes de ello o no.

Seguro que de algo suena a muchas personas el intentar alcanzar este estado de paz interior y aún están en la lucha de conseguirlo, o de mantenerlo y no dejarlo escapar.

¿No sabes muy bien cómo avanzar? Primera acción de un guerrero consciente: "No saber" [Película: El guerrero pacífico].

En primer lugar, el esfuerzo y la persistencia es un factor fundamental, al igual que cualquier arte. Existen multitud de formas y expresiones que nos permiten la realización, tanto interna como externa. Recordad que la presencia, como todas las artes, suele ser necesario trabajarla, y con un gran tesón!

Y el acercamiento se produce igual que con cualquier otra disciplina. Un comienzo lleno de ilusión (como para no!), y poco después, una sensación de andar prácticamente en la otra punta del camino! (Probablemente estemos equivocados, aunque en realidad eso no importa). Sin embargo, el mero hecho de darnos cuenta en qué punto nos encontramos, ya es motivo suficiente para sentir un cierto alivio. Alivio porque quizás sea la primera vez que conectamos con la fuente de la vida, del amor, el deseo de vivir en plenitud cada momento.

Y así, es posible que pasemos un buen periodo luchando por este acercamiento, a veces tan costoso. Más aún si el inicio del camino lo ha propiciado una situación lo bastante difícil como para cambiar una vida.

En cualquier caso, la mejor forma de andar este camino, es procurar pararnos a conectar siempre que sea posible. Es decir: buscar modos de volver sentir el presente, y buscar esa paz interior que comenzamos a intuir dónde se encuentra escondida.

En el libro del Poder del Ahora se exponen varios métodos: permanecer en nuestro cuerpo, dejar básicamente de pensar, escuchar el silencio, sentir el espacio... y la propia vida. Sentir, sentir, sentir. Mucho menos pensar, y mucho más sentir! Observa los paisajes y disfruta! Deja de pensar en lo que ves... simplemente, permanece atento. Muchos compartiréis la opinión de que al final, la naturaleza es la madre de la belleza, con mucha diferencia!

En mi caso, uno de mis medios favoritos es releer el libro de "El poder del ahora", aunque sólo sea un párrafo o una página cada día (o cuando necesito realmente volver a conectarme). En realidad, en muchas ocasiones sólo con tener el libro entre mis manos, o incluso pensar intensamente en él, ya consigue transmitirme esa paz que desea transmitir!

Lo importante es recordar qué medios son los que más te sirven a ti. De qué formas consigues devolver la paz a tu vida de la forma más rápida?

En ocasiones, es necesario ir parando durante todo el día, donde sea necesario, para recuperar aquello que nos vamos dejando por el camino. O simplemente intentar dedicarse un paseo o momento de gozo interno disfrutando de la belleza del mundo. Para eso, claro, es necesario proponerse dejar un poco de lado todo aquello que circule por la mente. Dale al botón del stop por unos minutos y date el lujo de disfrutar!

Y así, día tras día, sientes de fondo esa alegría de continuar intentándolo. Así, en este momento, quizás estés sintiendo el hormigueo de tus brazos y tus piernas, y una sensación de energía y relajación que continúa dejándote huella, tal y como estoy sintiendo yo.

Cada parada en el presente es un pequeño logro conseguido. Es un nuevo brote que da sus frutos. Y lo más hermoso de ello, es ser consciente de ello, cuando lo sentiste, y en este momento.

En próximas entradas, ofreceré más medios e ideas para reforzar nuestro estado de plenitud. Estaría encantado de escuchar algunas ideas vuestras. Descubriréis que compartirlas es una forma más de acercaros al presente, porque estáis enfocando vuestras energías en ello.

Un cálido abrazo

Un camino apasionante

Hubo una vez, tiempo atrás, un día que comencé con un proyecto similar a este blog. Aquel día estaba preocupado por cuál sería mi continuidad.

Aquel blog estuvo activo durante varios meses, y fue un gran lugar en el que compartí mucho amor por la vida con otras personas.

Hoy, doy rienda suelta a mi placer por disfrutar cada instante mientras redacto este pequeño post. ¿Cuánto durará este blog? El blog permanecerá siempre como conciencia, bien aquí, bien en mí, bien en todos mis amados lectores que os estáis deleitando con estas líneas.

Me alegra recordaros que dicho deleite no viene de ninguna sabiduría especial con la que os pueda embriagar.

Sé que disfrutáis tanto como yo sintiendo vuestro propio momento, ahora.

Bien, me diréis, pero... ¿cuánto tiempo escribirás en el blog? Y por supuesto, dicha respuesta no tiene contestación posible, ni tampoco importancia alguna.

Dejemos que la vida fluya entre estas líneas hasta que decida fluir por otros senderos. Y mientras fluya, sabed que mi deseo es compartir con vosotros todo lo que en esencia lleváis dentro, pues somos árboles de unas mismas raíces: una misma familia... un mismo ser.

domingo, 6 de noviembre de 2011

Algunos videos de interés

Sobre la vida 

Emotivo video sobre el otoño que he encontrado en una entrada de AMBAR, con un fantástico poema.






Videos destacados de Eckart Tolle sobre El poder del ahora

Qué es la presencia, y qué papel tiene la mente en cada instante de nuestra vida:


Bienvenidos al blog

Este post es una llamada a tu momento presente. Aquí no comenzó nada, no terminó nada... simplemente, este post está siendo expresado en este instante para recordarte que tú eres parte de él.

Estás inexorablemente unido a este presente, y lo único que puedes hacer en este momento es vivirlo plenamente y disfrutarlo lo máximo posible.

Un cálido abrazo,

Óscar